La Plaza de los Palomitos, oficialmente Plaza del Rey Jaime I, es un tesoro escondido en el corazón de Gandía. Este espacio único, conocido por su doble identidad, fusiona la rica historia de la ciudad con el encanto de la vida cotidiana valenciana.
En este artículo, te revelaré los secretos mejor guardados de esta emblemática plaza. Exploraremos su fascinante historia, descubriremos por qué es tan querida por los locales y te guiaré por sus rincones más pintorescos.
¿Plaza del Rey Jaime I o de los Palomitos?
Antes de adentrarnos en los detalles, aclaremos el misterio del nombre. Oficialmente, estamos hablando de la Plaza del Rey Jaime I (o Plaça del Rei Jaume I en valenciano).
Sin embargo, si preguntas a cualquier local por la «Plaza de los Palomitos» (Plaça dels Colomets), te dirigirán al mismo lugar.
¿Por qué este doble nombre? La respuesta está en el aire, literalmente. Esta plaza es famosa por la gran cantidad de palomas que la frecuentan. Con el tiempo, estos animales se han convertido en parte integral de la identidad del lugar, hasta el punto de darle su nombre más popular.
Pero espera, ¡hay más!
Los más veteranos de la ciudad puede que incluso la conozcan como la Plaza del Segó, aunque este nombre está cayendo en desuso entre las generaciones más jóvenes.
La era dorada del Cine Royalty
Uno de los capítulos más emocionantes en la historia de esta plaza llegó con la era del cine. El Cine Royalty (que durante un breve periodo se llamó Cine Goya) se instaló aquí, convirtiéndose en el corazón del entretenimiento de Gandía durante la primera mitad del siglo XX.
En aquella época, la plaza se parecía más a un parque que a lo que vemos hoy. Imagina las tardes de domingo, con familias y parejas paseando antes de entrar a ver la última película de moda.
Aunque el cine ya no existe como tal, su fachada sigue en pie, como un recordatorio silencioso de aquellos días de glamour.
Qué ver en la Plaza de los Palomitos
Aunque la plaza en sí misma pueda parecer sencilla a primera vista, alberga algunos edificios y elementos que merecen nuestra atención:
La Fachada del Cine Royalty
Aunque el cine ya no funciona, su fachada sigue en pie como un homenaje a la época dorada del séptimo arte en Gandía. Hoy, los bajos del edificio albergan diversas tiendas.
La Antigua Estación de Correos
Este edificio tiene una historia fascinante. Originalmente fue el instituto Ausias March, luego se convirtió en la oficina de correos y telégrafos.
Aunque actualmente está vacío (el servicio de correos se trasladó a la calle San Rafael), sigue siendo un edificio emblemático.
No te pierdas el pequeño reloj en su fachada.
El Convento de San Roque
Este edificio es quizás el más importante históricamente. Ha tenido múltiples usos a lo largo del tiempo, y actualmente alberga el archivo histórico en su ala derecha y la Biblioteca Central de Gandía en la izquierda.
Si te interesa la historia local o simplemente buscas un lugar tranquilo para leer, este es tu sitio. Además, aún se pueden apreciar algunos restos del antiguo convento, especialmente en el segundo piso.
La Iglesia de San Roque
Aunque técnicamente no está en la plaza, está tan cerca que merece una mención.
Para visitarla, solo tienes que girar por la calle San Roque hasta llegar a la pequeña plaza del Beato Andrés Hibernón (que, entre nosotros, es más una calle ancha que una plaza propiamente dicha).
La Estatua de Jaime I
En el centro de la plaza, como si vigilara todo lo que ocurre a su alrededor, se alza la estatua de Jaime I. Este rey, conocido como «el Conquistador», jugó un papel crucial en la historia de Valencia, y por extensión, de Gandía.
Su presencia aquí no es casual: es un recordatorio constante de las raíces históricas de la ciudad.
Y justo al lado, como si quisiera competir en protagonismo, suele haber siempre alguna paloma. Es una imagen que resume perfectamente la dualidad de esta plaza: historia y vida cotidiana conviviendo en perfecta armonía.
Cómo llegar
Llegar a la Plaza de los Palomitos es pan comido, ya que está en pleno corazón de Gandía.
Si vienes desde la estación de tren, solo tienes que cruzar la calle Mayor y preguntar a cualquier local. Te indicarán una de las calles a la derecha que te llevará directamente a la plaza.
Si acabas de visitar la Casa de la Marquesa, estás de suerte. Justo enfrente encontrarás una de las calles que desembocan en la plaza.
Para los que prefieren moverse en coche, el consejo es siempre el mismo en el centro histórico de Gandía: mejor dejarlo en el aparcamiento del instituto Gregorio Mayans o en el de la Feria, frente al Paseo de las Germanías.
Desde allí, un agradable paseo te llevará a descubrir no solo esta plaza, sino muchos otros rincones encantadores del centro.